La Joven Orquesta Sinfónica de Granada, dirigida por Edmon Levon, acompañó a tres voces de referencia en una velada dedicada al bel canto y a la música vocal española
El escenario del Palacio de Congresos, iluminado con tonos dorados y azules, se convirtió en el marco perfecto para una noche que fusionó tradición y emoción.
El concierto comenzó con una selección de varias de óperas italianas, donde las voces de los solistas brillaron con una técnica impecable y una expresividad conmovedora. El público, entregado desde el primer acorde, pudo disfrutar de piezas de Verdi, Puccini y Bellini, interpretadas con una frescura que solo los jóvenes talentos pueden ofrecer. La orquesta, precisa y matizada, demostró por qué es considerada una de las promesas más sólidas del panorama musical español.
La segunda parte de la gala estuvo dedicada a la música vocal española, con un homenaje a los compositores que han dejado huella en el género lírico. Se interpretaron obras de Granados, Falla y Turina, donde la fusión de la lírica y el folclore español transportó al público a paisajes sonoros llenos de pasión y nostalgia. Los bises, espontáneos y emotivos, cerraron una noche que quedó grabada en la memoria de los asistentes.
El broche final llegó con una interpretación coral de Noche en los jardines de España, donde la orquesta y los solistas se unieron en un clímax de armonía y virtuosismo. El maestro Levon, visible emocionado, agradeció al público su apoyo y destacó la importancia de eventos como este para mantener viva la tradición lírica.
La Gran Gala Lírica no solo fue un éxito artístico, sino también un recordatorio del poder de la música para unir generaciones y culturas. Los asistentes abandonaron el recinto con la certeza de haber vivido una experiencia única, donde el talento y la pasión se dieron la mano.